La coalición de la OTAN guía a los rebeldes detrás de Kadafi, pero nadie sabe para dónde. El hijo que estaba detenido, sonríe entre los suyos por la tele. Vencederos sin vencido, los líderes aliados igual se adjudican la victoria porque no hay mejor derrota que un buen triunfo.
VENCEDORES VENCIDOS
Como el ladrón que huye gritando “agarrenló, agarrenló”, así Obama, Sarkozy, Berlusconi y Cámerun persiguen a Kadadi escapando de sus perseguidores. Detrás vienen los indignados y cada vez son más.
Crece la desocupación en Estados Unidos y Europa, la recesión les respira en la nuca, un nuevo rescate debe ser aprobado para Grecia –y marche otra vuelta para todos, cantinero-; de Atenas a Londres y de Berlín a Barcelona se tensa el descontento, y la represión sigue siendo la única respuesta. No hay plan B, reptien sonriendo nerviosos los responsables. Camerún, al mejor estilo Mubarak, quiso culpar ar las redes sociales. Zapatero, al grito de “esta papa quema”, adelantó la elecciones y chau. Berlusconi no da más. Sarkozy venía mal, y absolvieron a Strauss Kahn, y ahora hasta Alemania dejó de crecer en un repentino silencio fabril que ensordeció todas las bolsas. No hay plan B, pero lejos muy lejos de ningún mea culpa, los responsables huyen hacia adelante envueltos en el matadero árabe que encima llaman "primavera", y detrás de cualquier dictador de esos que ayer besaban en sus dos mejillas. Mientras tanto Kadafi no aparece, dejó Tripoli sin agua tal cual amenazó, y el hijo que le habían detenido sí apareció, pero por televisión y cagándose de risa.
Ungidos por una victoria cuyo vencido sigue suelto y aún ataca, Obama, Sarkozy, Cámerun y Berlusconi levantan el dedito por las pantallas del mundo, y entre espumarajos negros como de petróleo crudo, reparten consejos como si hubieran de verdad vencido.
El Martiyo no está a favor de Kadafi, ni pretende que no aparezca y los burle o los venza como si esto fuera una película de ellos. Por el contrario, sabemos, tan bien como ellos, que Kadafi no es peor ahora de lo que era hace tan poco cuando ellos tanto lo besaban.
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| Colección "Amigos son los amigos" |
En Siria en simultáneo Al Assad junta muertos y desaparecidos de a miles, acaba de romperle las dos manos a uno de los mejores dibujantes del país porque se burlaba de él, pero el Consejo de Seguridad y todos estos aliados que incendiarion Libia, entienden que allí por ahora basta con un buen tirón de orejas, una condena formal, y ya ya…
El Martiyo no está a favor de Kadafi, como tampoco de sus perseguidores, que con iguales difusos criterios, mañana persiguen a cualquiera, a usted, a mí, al que tenga petróleo, agua, comida, y todo lo que tanto precisan…
El Marityo no está a favor de ninguno de ellos, apenas los mira caer, y escapar… a Kadafi por allí, a los otros detrás… perseguidores y perseguidos huyendo del mismo fracaso en el que ayer se abrazaban.
El Martiyo no está a favor de ninguno de ellos. Al contrario: que se vayan todos, Alí Babá, y sus 40 ladrones.
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