////// Año XVIº /// Editor Anónimo: Daniel Ares /// "Prefiero ser martillo que yunque", Julio Popper ///

jueves, 21 de abril de 2011

ESCRITOR X ESCRITOR - HOY: CERVANTES X DOSTOYEVSKI.

ESCRITOR POR ESCRITOR


Aunque más no fuera por alentar o sostener o cuando menos celebrar esa magnífica fraternidad fuera del tiempo y del espacio que suscita la escritura entre escritores, aquí El Martiyo presenta esta sección que fija, recorta y comparte, en fragmentos preciosos, pedacitos de ese platónico amor de verdad desinteresado, de verdad espiritual, de verdad eterno… de verdad amor.
Escritor x escritor, como Destellos Ajenos, es un espacio exquisitamente escrito, pues lo escriben exclusivamente gigantes inmortales, sólo que aquí los unos elevan a los otros elevándose así en prueba de una generosidad como la que soñaba don Antonio Machado, cuando “la monedita del alma, se pierde si no se da”.




ESCRITOR x ESCRITOR


Miguel de Cervantes Saavedra x Fiodor Dostoyevski:

Cervantes



"Veréis en Don Quijote, en cada página, revelados los arcanos secretos del alma humana. En todo el mundo no hay obra de ficción más profunda y fuerte que ésa. Hasta ahora representa la suprema y máxima expresión del pensamiento humano. la más amarga ironía que pueda formular el hombre y, si se acabáse el mundo y alguien preguntáse a los hombres: Veamos, ¿qué habéis sacado en limpio de vuestra vida, y qué conclusión definitiva habéis deducido de ella?, podrían los hombres mostrar en silencio el Quijote y decir luego: Ésta es mi conclusión sobre la vida y... ¿podríais condenarme por ella?".

("Diario de un escritor", 1874-1878)


Dostoyevski

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miércoles, 20 de abril de 2011

ANÉKDOTAS: HOY: "Busco mi destino", con Mark Twain...

Anékdotas

Hoy: Busco mi destino

Con Mark Twain

Como es habitual en la gente de genio, Mark Twain era un hombre muy distraído.
Ya famoso, en un viaje en tren, de gira por los Estados Unidos, a la hora de mostrarle su pasaje al guarda, no consigue encontrarlo y se desespera. El guarda lo reconoce, y lo calma.
-- El autor de Tom Sawyer no precisa pasaje...
Pero Twain no desiste de la búsqueda cada vez más nervioso, y le dice:
-- No es eso, es que no me acuerdo a dónde iba…


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martes, 19 de abril de 2011

TIEMPOS MODERNOS: el mundo que nos va quedando...

El Martiyo Producciones Presenta...


 Tiempos Modernos XVIII



LOS CHISTES DE BORGES... el último de Ulises: perros de la noche...

Los chistes de Borges




Cuando le preguntan a María Kodama qué es lo que más extraña de Borges, ella no duda en responder: “su sentido del humor”. Uno de los hombres más divertidos de la historia del hombre, sin embargo, decidió pasearse por su siglo disfrazado de viejo aburrido, sin romances rimbombantes ni escándalos de vodeville, con su traje siempre gris, su bastón y su ceguera, su hablar lerdo y trabado, y su genio camuflado de sabio que no sabe. No es arbitrario pensar que esa sola caracterización, única y total, fuera su más secreta y grande broma.


El último de Ulises.
Borges y Petit de Murat compratían, entre otras cosas, largas caminatas bajo la noche hacia las periferias de la ciudad, como quien huye hacia el sur por arrabales últimos. Cierta vez, perdidos los dos entre descampados de Valentín Alsina, son asaltados y despojados de todo. Ya liberados por los maleantes, ya desnudos, sin saber exactamente dónde estaban, empiezan a caminar en busca de ayuda, pero todo lo que encuentran son perros y más perros que surgían de la oscuridad para seguirlos y ladrarles. Borges se puso tan nervioso, que se echó a correr. Ulises quiso calmarlo:
-- Dicen que los perros no muerden a una persona cuando está desnuda...
-- Bueno… pero de eso que se ocupen los perros, nosotros ocupémonos de correr.

LA NACIÓN NOS AVIVA: SOMOS BOBOS.


Cada tanto y casi siempre involuntariamente, los principales diarios desnudan con impudicia la lógica profunda que los inspira.
Esta vez fue La Nación, que preclaro pretende avivarnos, mientras sin querer nos recuerda que somos todos estúpidos.


LOS PELOTUDOS DE SIEMPRE



En un típico caso de tiro por la culata, un artículo firmado por Raquel San Martín el domingo en La Nación, nos revela la lógica profunda del pensamiento que los inspira, según el cual, en rápida síntesis, el pueblo es idiota y se cree cualquier cosa.
Bajo el doble título: La batalla por el sentido común: ¿hacia una hegemonía kirchnerista?, no sólo anuncia el miedo que lo alienta, sino que ya desde el copete escupe su verdad:
“El debate atraviesa la discusión política: para algunos, el gobierno impulsa un intento programáticamente articulado, ya no de imponer su verdad sino de conquistar con ella a la opinión pública, planteándose en la mesa de cada día como el único alimento intelectual que vale la pena. En pleno año electoral, una pregunta clave: ¿podría esa influencia tener efecto sobre las urnas en octubre?
Más allá de lo retórica que resulta la pregunta de remate, de arranque queda claro que para La Nación resulta inconcebible la posibilidad de considerar la democracia como expresión de la voluntad popular, sino que, curiosamente, es más bien lo contrario: la democracia impone la voluntad popular.
No se trata de ninguna madurez en los argentinos, que tras años y décadas de fracaso sistemático, de crímenes, latrocinio, impericia y desidia, de pronto ante un gobierno que acierta más de lo que se equivoca, que hace lo que dice que hará, que logró el crecimiento del país y que muestra a cada paso sensibilidad social, y por lógica simple deciden apoyarlo, no, no es eso. No para La Nación.
Para La Nación el pueblo, la gente, nosotros, usted y yo, somos una especie de bobo grande al que le venden cualquier cosa.
En una rápida la enumeración, el artículo acumula una serie de razones que le darían la razón si se leyeran a las corridas, como propone su autora: “la exaltación de algunos personajes y acontecimientos de la historia argentina” (dice pero no dice cuáles, porque también se exalta a San Martín –el general, no ella, más bien, ja- a Belgrano y otros próceres, aunque no a Mitre ni Roca, claro), “la división del mundo en nosotros y ellos” (¿el mundo, Raquel?),  “la narrativa militante de los años 70” (ahí nos superó, lo admitimos, no entendemos a qué se refiere), “la elevación de Néstor Kirchner al panteón de los héroes” (¿y dónde queda el panteón de los héroes?), “la circulación de ideas en medios, redes sociales y blogs oficialistas” (¿lo dirá por nosotros?), “la ubicua letra K” (¿Cristina y sus hijos deberían cambiarse el apellido?... ¿Alicia también?), y al cabo de cuestionar tales “hechos”, concluye así nomás que todas estas cosas: “serían herramientas de una ingeniería política dedicada a alcanzar una hegemonía política que alimente los discursos y las ideas privadas”.
Es claro: los pueblos no eligen a sus gobernantes, sino que los gobernantes eligen a sus pueblos, y se los llevan. La gente no se expresa en las urnas, allí apenas cumple el mandato que le dan desde arriba.
Y nadie se da cuenta, sólo ellos, La Nación y sus destacados columnistas que así avanzan con su faro de la verdad entre las tinieblas de la ignorancia del vulgo, que venimos a ser nosotros, la masa, el montón, ese ganado arreado, ora por unos, ora por otros…  
¡El Flautista de Hamelin nos gobierna, carajos!
En despachos herméticos seres oscuros manipulan el cerebro de cada uno de nosotros.
Son cuatro o cinco tipos, no más, que nos manejan, elaboran nuestros pensamientos, luego dicen apenas “pasála”, y nosotros, bobos, “la pasamos”. Idiota por idiota hasta el idiota final.
Cristina le dice a Aníbal, Aníbal le dice a Víctor Hugo Morales, Víctor Hugo a Florencia Peña, Florencia Peña a Pablo Echarry, Echarry a Dolina, Dolina a Santaolalla, Santaolalla al Indio Solarí...
Nadie piensa, sólo ellos, y como vemos, ya no es preciso ocultarlo, total… total ya ni pensamos...
No  hay sorpresa, qué va.
Hace poco tan luego lo gritó por todas partes su columnista estrella, Mario Vargas Llosa, quien le explicó al mundo que “hace 40 años (sic) que los argentinos se equivocan en las urnas”. En síntesis: somos idiotas.
Por supuesto al artículo de San Martín no le faltan voces que le den la razón, (y si faltan se inventan, eso no es obstáculo para un buen periodista industrial). Sin embargo en un momento, la nota cita un pasaje de otra de Beatríz Sarlo, a propósito de la cumbia Nunca menos, que suena durante las transmisiones de Fútbol para todos; y abre comillas y dice la Sarlo: “Tengo, por primera vez, la sensación de que así se expresa una hegemonía cultural, una trama donde se entrecruzan política, cultura, tradiciones, costumbres y estilos”.
La cita en sí no conlleva crítica ninguna, pero en el contexto de la nota de San Martín, queda claro que la expresión “hegemonía cultural” viene cargada de reproches. Por supuesto se ignora la positiva posibilidad de que dicha hegemonía signifique, acaso como consagración de los festejos del Bicentenario, que por fin los argentinos se encuentran consigo mismos, se aceptan, y marchan. Así de simple.
En esa marcha deciden que este modelo los favorece, y lo apoyan. Les place la mujer que lo conduce, porque acaso esa mujer los interpreta, y la defienden.  Así de simple, y de magnífico.
Pero La Nación -ya no sus empleados, ni sus estrellas, ni siquiera sus dueños-, La Nación es más que un diario, incluso más que un holding, es antes una fuerza secular, una visión de la Argentina, la expresión de un pensamiento, de una lógica profunda cuya regla de oro es esa: la gente en general es idiota, ignorante o ambas cosas, excepto cuatro vivos que se quieren quedar con todo, algunos iluminados que trabajamos aquí, y por supuesto, nuestros lectores más conspicuos.  
Fuera de eso, para La Nación, no hay más. Ni aciertos del gobierno, ni un país que se recupera, ni un pueblo que se despierta y es, ni un pasado que los delata. (*).

El Flautista de Hamelin, y nosotros las ratas.



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Destellos Apócrifos. HOY: Eduardo Duhalde.

Destellos Apócrifos:

"No somos nada".

Eduardo Duhalde.

lunes, 18 de abril de 2011

LOS 20 MANDAMIENTOS DE UN BUEN PERIODISTA (DE CLARÍN)



En exclusiva y en secreto, El Martiyo tuvo acceso al nuevo decálogo interno que rige en las redacciones de los "principales diarios" como doctrina de principios para sus periodistas.
 Mucho más que un manual de estilo: una guía de supervivencia.


Los 20 Mandamientos


  1. Antes de escribir una sola palabra deja de lado cualquier sentimiento personal, cualquier dilema moral, y piensa nada más en todo lo que vas a comprarte o pagar con el próximo sueldo, y en los beneficios extras que otras empresas no te darían.
  2. Recuerda siempre que el diario no tiene competidores, sino enemigos, y que éstos importan más que los lectores.
  3. Una mentira bien editada jamás será ninguna verdad, pero puede granjearte un ascenso, o cuando menos una palmada de Van der Koy, incluso de Kirchsbaum. (¡y a lo mejor tu nombre llegue a oídos de Magnetto!).
  4. El gobierno siempre se equivoca.
  5. Ningún juez es justo, a no ser cuando falla como queremos.
  6.  Vale mucho más una mentira a nuestro favor, que cien verdades a favor del gobierno.
  7. De Papel Prensa ni hablar.
  8. De los hijos de la Noble, tampoco.
  9. Si recoges información verídica que pueda perjudicarnos, recuerda ensuciar públicamente a la fuente antes de que dicha información salga a la luz.
  10. Elísa Carrió es uno de los referentes políticos más serios de la Argentina.
  11.  La Ley de Medios es una “ley mordaza”, no importa que te favorezca a ti, tú eres apenas un empleado y podríamos despedirte ya mismo si piensas otra cosa, ¿o qué te creíste?...
  12. Todos los periodistas de nuestros medios gozan de absoluta libertad de expresión. Y son felices. Todos.
  13. El diario no es una empresa con fines de lucro y prácticas monopólicas: es una cruzada santa para alumbrar al pueblo argentino que es medio idiota.
  14. Las Abuelas y las Madres de Plaza de Mayo no supieron cuidar a sus hijos, y bueno… qué querés.
  15. Jorge Lanata es delgado.
  16. Ni La Nación ni Clarín apoyaron jamás a la dictadura militar. Fue todo casualidad.
  17.  Cuando te digan “Moyano”, ataca.
  18. No busques razones para defender lo indefendible: obedece.
  19. La democracia es muy importante, pero no más que nosotros. 
  20. Nunca olvides quién te paga... pibe.


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LOS 7 PECADOS EN 7 FOTOS Y UN SOLO CLICK...

El Martiyo Producciones Presenta...

* LOS 7 PECADOS EN 7 FOTOS *

Aquí en un sólo click toda la serie de esta sección gráfica y finita inspirada en ese poético invento católico de los 7 pecados capitales, que tantas ficciones, dramas y comedias, conflictos y prejuicios han inspirado a su vez, sin que se les conozca ningúna otra razón más o menos positiva...
Aquí entonces, para ver, reflexionar, cortar o pegotear, los 7 pecados en 7 fotos y un solo -y valiente- click...
(Pecar sería huir)

LAS CHICAS DEL MARTIYO. HOY: opiniones sin número...

“Las Chicas”

Hay quienes opinan que esta chica está excedida de peso,
y hay quienes opinan que está bárbara.
Pero ninguno de todos nos consigue su teléfono.

INTERNA DEL PJ FEDERAL: DOS CIEGOS PARA UNA LINTERNA.


Debimos avisarlo antes, pero lo avisamos ahora. Hace rato lo vimos, pero no lo creímos importante. Sin embargo la tendencia se afirma y todo indica que gracias a las elecciones del próximo octubre, este año 2011 promete dejar en la historia argentina auténticos hitos de la comicidad.


LA PATRIA DE LA RISA





Los chistes de Macri (su apuntador en vivo, Miguel del Sel gobernador, Rodríquez Smithers Berreta, la Metropolitana); ¡los chistes de Cobos!,  que se retiró sin haber llegado, y cuyo epitafio está a la altura del mejor Woody Allen: “y no renuncio a mi cargo de vicepresidente, para demostrar que un radical también puede terminar su mandato”, ¡buenísimo!, ¡y Elisa Carrió, como “la mujer bomba”!, o los diálogos de verdad graciosos del dúo Solanas-Grondona, en fin… el vacío que nos dejó Alberto Olmedo en el grotesco nacional, ya no es tal…
Pero por encima de todos, ya entre el sainete, el circo y la kermés de pueblo, destaca la interna del PJ Federal y su espectáculo para toda la familia “Venga, vote y diviértase”, con los trucos de Mario das Neves y sus mágicas urnas, Felipe Solá y su grupo “Los si me pagan voy”; y encabezando compañía, claro, esos dos capos cómicos que son Eduardo Duhalde y Alberto Rodríguez Sáa llevándose todas las palmas con su hilarante sketch de los dos cieguitos que se arrebatan sin parar una linterna. De verdad hilarante.
Uno tras el otro, de gira por todo el país -federales al fin-, se persiguen y se pelean, se acusan y se abrazan y se vuelven a pelear sin motivo ni sentido ninguno, a no ser tan luego hacer las delicias de grandes y chicos…
Pocos grandes, y aún menos chicos, hay que decirlo (y cada vez menos, es cierto) … pero eso no es culpa de ellos, los tiempos han cambiado, lo venimos señalando, acabaron los días del viejo varieté…
Triste payaso de chistes vencidos, este fin de semana, Eduardo, deprimido, se borró. Para sorpresa de sus compañeros de elenco, dijo que el espectáculo era “un papelón”, y se bajó de la gira por Catamarca, Santiago del Estero y Tucumán. Una pena.
Alberto, fiel a su público, arlequín de raza, siguió sin él improvisando una variante del mismo sketch titulado ahora: El ciego contra el espejo. Y no le fue mal.
En una carrera sin adversarios, se presentó a elecciones en las tres provincias ¡y ganó en las tres!. Un éxito, cómo no. En uno de los momentos más cómicos del sketch, sus voceros anunciaban con cierta frecuencia que los comicios se desarrollaban con toda normalidad, como desmintiendo un posible enfrentamiento final de Alberto contra Alberto. Genial.
Sin embargo, insistimos, nos parece una pena que Eduardo ya no esté, con su cara de Barracas con La Boca al lado, y sus recitados escolares “Argentina te quiero/ con trabajo y hambre cero”, y… volvé, Eduardo, Alberto sin vos es Hardy sin Laurel, Abott sin Costelo, Antonito sin Shakira…
¿Qué importa que cada lunes se vuelvan a casa con la torta en la cara de otra derrota más gane quien gane?...
¡Pero si justamente ahí está la gracia… Eduardo, Alberto!
¡Ese el chiste!... ¿No lo ven?...
Gane quien gane, ¡siempre pierden los dos!...
¡Es buenísimo!...
¿No lo entienden?...
¿No les parece gracioso?...
Qué raro, a nosotros sin embargo nos da una risa bárbara...



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viernes, 15 de abril de 2011

"Más de 1000 Palabras": "EL TILENTE", ¡Nuevo pez de orígen humano!

El Martiyo Producciones Presenta...


*Más de 1000 Palabras*
(galería de imágenes)



 Título:

"El Pez-tilente"

LOS BOMBARDEOS PREVENTIVOS DE CLARÍN Y LA NACIÓN.



Desesperados ante una realidad que no les sirve,  los "principales diarios" descartan el presente, ignoran el pasado, y  van incluso más allá del periodismo de anticipación, aplicando a las técnicas habituales del oficio,  la doctrina  consagrada por el pensador norteamericano George W. Bush: los bombardeos preventivos.



APUNTEN, DISPAREN Y PREGUNTEN





Se acentúa hacia el delirio la tendencia a las prácticas esotéricas en los principales diarios argentinos, como gustan autoproclamarse Clarín y La Nación… Se ve que despechados por un presente adverso, se aferran a un futuro que alucinan horrible como toda esperanza.
Apenas ayer lo señalábamos en la apreciación de nuestro Premio Manco de Lepanto a propósito del párrafo de Marcelo Cantón –empleado de Clarín-, quien se presume “analista” porque se regodea en “la sospecha presente que levanta a partir de una dudosa duda futura”.
La Nación hace lo mismo. “Ahí viene el Cuco”, nos susurra en cada línea desde hace años… (no cuando gobernaban los militares, entonces no había cucos a la vista… los mataban y ssshhh)…
El caso es que uno y otro, que son lo mismo, La Nación y Clarín, parecen entregados, no ya al periodismo de anticipación, que es una variante legítima del oficio -y que en tal caso consiste en proyectar el mañana a partir de la realidad presente y la experiencia del pasado-; sino en un género nuevo y acaso imposible: el periodismo de suposición.
A propósito de la lógica pretensión de tener voz y voto allá donde tenemos nuestro dinero, es decir, de la participación efectiva del Estado allí donde el Estado tiene acciones –Papel Prensa por ejemplo-, los principales diarios no ven allí sino el surgimiento de una nueva Unión Soviética al este de Chile… Y no precisan de la realidad, no les importa el presente,  no esperan el futuro, tampoco lo argumentan, ni siquiera se puede decir que lo imaginan… simplemente lo suponen.
 Así ayer Cantón en Clarín nos decía, por ejemplo: “Pero lo que les cabe dudas es si se trata de una decisión que sólo apunta a posicionar un discurso frente a las elecciones o es una tendencia que crecerá en el tiempo, sobre todo si Cristina Kirchner es reelecta presidenta”.¿Para qué esperar los hechos cuando es permitido suponerlos, no?... ¿Total a quién le importa mañana el diario de hoy, no?...



Tan luego hoy Claudio Pangi, empleado de La Nación, arranca su columna reconociendo la lógica del principio que dice “si participo, participo”, admitiendo incluso que habría que ser un “explotador despiadado” para oponerse. Cierra sin embargo ese primer párrrafo, y por lo tanto el razonamiento de los hechos actuales y pasados, con una sospecha futura por supuesto temible: “cabe temer que los intereses que se dicen resguardar sean los que correrán mayor peligro”... Y a partir de allí -confundiendo sin ninguna explicación al Estado con “los delegados de la Casa Rosada-, desparrama un rosario roto de preguntas sin respuestas: “¿pedirán (dichos "delegados") aumentos de tarifas para mejorar la ecuación de la empresa”, “¿qué rol jugará La Campora en todo esto?, y así...  Enseguida, sin embargo, , Pagni  nos recuerda su obediencia debida en una rápida línea (y acaso sin proponérselo): “ahí está Guillermo Moreno, con sus guantes de de box, enriqueciendo las deliberaciones de Papel Prensa”. (Desde luego Pagni olvida cuando dichas "deliberaciones" se "enriquecían" con los picanas y las armas del general Gallino y otros socios de sus patrones)…
Pero una vez más -bueno es remarcarlo-, ni La Nación ni Clarín inventan nada, qué va, ja...
Esto lo inventó hace rato George W. Bush con sus inútiles pero fatales bombardeos preventivos.
Clarín y La Nación no hacen más que copiarlo: en resguardo de sus intereses, te bombardean por las dudas, y después, entre los escombros, si encuentran algún inocente, le piden disculpas y chau. Qué hay.
Bush estaría orgulloso de sus muchachos, cómo no…
(¿No serán estos, despuès de todo, los famosos aunque aún anónimos periodistas cautivos de la embajada norteamericana que mencionaban aquellos cables de Wikileaks y que Clarín y La Nación tanto ocultaron hasta que Página 12 los publicó?)...
Por las dudas, nobleza obliga, El Martiyo pide por ellos:





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jueves, 14 de abril de 2011

DESTELLOS AJENOS. HOY: Joseph Conrad.

Destellos Ajenos:


"Remontar ese río fue como volver a los primeros tiempos de la creación cuando la vegetación estalló sobre la tierra y los árboles eran reyes".

Joseph Conrad

PREMIO MANCO DE LEPANTO PARA ESCRITORES SIN MANOS: ¡NUEVO PARTICIPANTE!


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¡EL MARTIYO CONVOCA­­!


¡u$s 50.000 de premio!
¡Y una estatuilla de Alfredo De Angelis sin los dientes!


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GRAN CONCURSO LITERARIO

“EL MARTILLO EN LOS DEDOS”



"PREMIO MANCO DE LEPANTO
PARA ESCRITORES SIN MANOS"
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"Es más fácil atrapar un conejo que un lector".
 Gabriel García Márquez.



Se puede vivir sin atrapar un conejo cuando uno se dedica a vender cosas para leer. Pero entonces hay que atrapar a los lectores, porque sino sí que no se puede vivir…
La dictadura que mató tanta gente y rompió tantas cosas, también le hizo un gran daño al periodismo argentino, y no sólo por sus desaparecidos, y su censura, sino también porque entonces los grandes medios pasaron a depender en todo sentido del estado, y ya no de sí mismos. Pronto los buenos contactos, reemplazaron a los buenos periodistas, y así las redacciones se fueron quedando sin los maestros imprescindibles cuando atrapabas al lector, o te morías de hambre…
Hoy más que nunca es difícil atrapar un lector, cuando hay tanto cazador suelto: la web, la tevé satelital con sus incontables canales y sus cadenas de noticias 24 horas, el i-pod, el blackbeery, la play station, el dvd, sin contar el cine, la radio, el circo, el teatro, o ya que hablamos de lectores, la buena literatura, que por ser inmortal, todavía existe.
En este duro contexto, sin embargo, los grandes diarios argentinos (los que tienen el dinero para pagar las mejores plumas), parecen ir a la caza de su conejo con las patas de rana puestas…
El Martillo en los Dedos, Premio Manco de Lepanto para Escritores sin Manos, es también eso: un llamado a despertar, si se quiere un doblar de campanas, antes de que doblen por ti… hijo.
¡¡Se van a morir de hambre si no atrapan un lector, al menos uno cada día, para la cacerola de la noche!!...
¡El Estado ya  no está para ayudarlos, muchachos, terminaron esos tiempos!, hoy hay que vender… o morir.
Aùn asi, claro, mantenemos la duda original que le dio luz a este certamen: ¿Es esto la aurora terminal de algo que venía para la mierda, o el alba de una lengua nueva, inédita, imposible y sin embargo?...
Mientras tanto, para nuestra triste suerte, se estorban en fila los aspirantes a participar, cada cual alzando ansioso el ripio de su fragmento, como orgulloso de lo que ha deshecho con las palabras…
Previa recurrente aclaración, vamos al héroe del día, y la correspondiente apreciación al pie…

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ACLARACIÓN RECURRENTE

En previsión de comentarios del tipo "y estos quiénes se creen, ¿Borges?", acalaramos aquí una vez más: no nos creemos ni Borges ni Céline, ni Vallejo ni Pessoa ni nada por el estilo, pero sí nos gusta leer a Vallejo y a Céline, a Borges y Pessoa y cosas por el estilo, de manera que, como cualquiera que acostrumbró su paladar a los mejores vinos, cuando prueba kerosén sin tragarlo te lo escupe.


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Hoy alumbra nuestro espacio Marcelo Cantón, empleado del diario Clarín, aparentemente analista –o al menos así lo anuncia el diario-, y dueño de una prosa por lo menos sorprendente, desde el punto de vista no sólo clásico, moderno o académico, sino también clínico. Un caso sin duda complicado, que acaso trascienda este certamen y sus propósitos…
Pero vamos mejor a la obra, para lo cual, como es norma del concurso, seleccionamos el primer párrafo de un artículo reciente, o sea: lo más importante de lo último, pues si ahora estás escribiendo así, y si arrancás así para atraparnos… bueno, bueno, mejor sacáte las patas de rana que te vas a romper los dientes…

“Para los empresarios, la ampliación de la cantidad de directores estatales en empresas en las que el Anses es accionista tiene un solo sentido: una avanzada del Fisco sobre el sector privado. Pero lo que les cabe dudas es si se trata de una decisión que sólo apunta a posicionar un discurso frente a las elecciones o es una tendencia que crecerá en el tiempo, sobre todo si Cristina Kirchner es reelecta presidenta”.
(“Como The Wall, otro ladrillo en la pared”, Marcelo Canton, diario Clarín, 14/4/11).


Apreciación:

Si hablamos de una prosa con implicancias clínicas es porque ya en una primera lectura se advierte con claridad que el autor tiene problemas respiratorios.  
“El estilo es una respiración”, nos decía Cabrera Infante, y por lo visto Cantón fuma demasiado, o padece asma, o sencillamente se sienta a escribir después de subir seis pisos por escalera. Inmediatamente la cadencia del texto, nos indica problemas auditivos… cada frase (la nota entera) lleva el rítmo de un ataque de tos... hasta que rápidamente el que se queda sin aire es el lector, que precisa salir a respirar, y ya que está, aprovecha para rajar…
No interesa, aquì, el propósito político del texto, su ineficiencia por futilidad, la sospecha presente que levanta a partir de una dudosa duda futura, y su imposibilidad por lo tanto para atrapar sino al lector que ya es cautivo del diario…
Desganado, mal puntuado, deforme, por todos lados el texto es literalmente inútil: no entretiene, no informa, no convence, exige el esfuerzo del lector para componer la frase que el autor nos arroja a las corridas, y así apenas proclama o amenaza o intuye o no se sabe, pues por sus propias falencias, tampoco su intención se entiende.
Pareciera como si Cantón busca atrapar su conejo usando minas antipersonales… y los caza, tal vez, pero al instante también los revienta.  
Desde luego le deseamos a nuestro nuevo participante la mejor suerte del mundo… nosotros, infelizmente, ya lo leímos.



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¡EL MARTILLO EN LOS DEDOS!

¡Por la salud de nuestros hijos!

¡No deje su diario al alcance de los niños!

¡ELLOS TAMBIÉN TIENEN DERECHOS!

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¡PREMIO MANCO DE LEPANTO PARA ESCRITORES SIN MANOS!

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Aforismos: "El dinero va y viene...

Aforismos:



"El dinero va y viene,
el tiempo no."